Tuesday, August 3, 2010

EL PERDON

El haber escuchado cientos de testimonios me permite saber que uno de los temas más difícil en un conflicto de relaciones interpersonales es perdonar al otro.

Hablo constantemente con mujeres y hombre que interrumpieron su relación hace años y continúan recriminando comportamientos de su ex pareja.
El tiempo, el correr de los años no borra las ofensas, el llegar a un entendimiento o acuerdo económico no cierra las heridas.
El poder conversar sobre temas de los hijos no produce sanidad de nuestras emociones dañadas por el abandono, la infidelidad o cualquier otro motivo que provoco la ruptura de un matrimonio.

¿Como evitamos esto entonces? ¿Qué habría que hacer para perdonar?

Un excelente método es el revisar minuciosamente y sin temor cada uno de nuestros defectos de carácter.
Hacer una lista por escrito y revisar como está nuestra ira, fidelidad, celos, egoísmo, paciencia, etc.

Y cuando nombro la fidelidad, no solo me refiero a la física, también a nuestros principios, a nuestros compromisos.
O sea fijarnos más en nosotros mismos. A veces, el pensar tanto en los defectos de la otra persona provoca que olvidemos como realmente somos.

Cuando relea la lista y encuentre sus mentiras, sus enojos, sus chismes y todos sus actos no agradables a Dios; podrá darse cuenta que a pesar de cómo usted es, Dios le ama y perdona.

Pensó alguna vez que Dios ama profundamente a la persona que lo perjudico. Sí, sí, es verdad porque Dios ama a todos.
Entonces dígame: ¿cómo puede continuar sin regalarle su perdón?

Si no se perdonó a la persona que nos daño sigue atado a esa persona y ella va a continuar controlando su vida.
La amargura que provoca la falta de perdón le hace perder la gracia de Dios, le estorba y molesta a todo su entorno.

¿Entonces como hacemos? Miré al otro a través de los ojos de Jesús, confié en que Dios hará justicia, perdónelo y deje que Dios se encargue de lo que a usted le hicieron.

El perdonar no significa que el otro tenía razón, ni que se salió con la suya, ni que debe volver a confiar en él o ella; significa que está en obediencia a Dios y le ha entregado a ÉL la situación.

Para finalizar, te propongo que a lo largo de esta semana recuerdes ESTO “No juzguen a nadie, para que nadie los juzgue a ustedes”.

2 comments:

  1. yo realmente almiro tu talento y la duresa con las que escribes estas palabras sabes el punto de la debilidad de los hombres y en que enfocarnos y no en las devilidades.que dia a dia nos atormentan.yo prinsipalmente soy uns persona que trabajo dia a dia para darle lo mejor no alo que me rodea prinsipalmente si no a dios, mi odjetivo es el y pienso que asi sera mas fasil ganarme a los demas......es dificil muy dificil pero no imposible mientras pongamos a dios de pormedio..

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  2. Es verdad es duro perdonar ,pero debemos de hacerlo de corazòn para estar en paz con DIOS y con nosotros mismos ,màs duelen las palabras u ofensas dichas por seres que tu realmente amas y nunca esperaste eso de ellos ,pensar que rien contigo pero que de repente te das vuelta y critican lo ùltimo tuyo ....yo se lo he dejado a DIOS y gracias por tus palabras sabias

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